*Cuatro lanchas incendiadas y tres piratas detenidos fue el saldo de un enfrentamiento en altamar entre…
Cuatro lanchas incendiadas y tres piratas detenidos fue el saldo de un enfrentamiento en altamar entre pescadores de los puertos de San Felipe, Río Lagartos y Las Coloradas y pescadores furtivos que buscan llevarse el producto marino de los porteños locales, quienes lo han conservado durante muchos años.
De acuerdo con la información recabada, durante un operativo ocho embarcaciones de los lugareños salieron a recorrer la zona, visualizaron a poco más de 30 millas de la playa de San Felipe cerca de 400 lanchas ´piratas’ y después de enfrentarlos lograron acorralar a 10, pero únicamente consiguieron detener a cuatro las cuales hundieron con todo y motor en altamar.
A los piratas se les aseguro una nevera de aproximadamente 200 kilos que contenía diferentes especies en peligro de extinción, tales como pepino de mar, pulpo, caracol y mero, entre otros.
Los pescadores, que omitieron su nombre por razones de seguridad mencionaron que “ya están cansados de que las autoridades federales y locales no puedan encontrar y detener a los piratas en sus rutinas de vigilancia”.
Aseguraron que las autoridades se encuentran coludidas con la mafia pepinera proveniente de Celestún y Quintana Roo para devastar la zona y aparentemente no hacen nada para detenerlos
Por su parte el secretario general de Gobierno, Roberto Rodriguez Asaf, afirmó que hay control de la situación en ese puerto de parte de los cuerpos de seguridad.
“La vigilancia no se ha descuidado, al contrario, hace un mes en Río Lagartos se detuvo a siete pepineros furtivos, se aseguró 200 kilogramos de equinodermo, los agentes de seguridad llegaron al momento de la captura del recurso, ahora se acudió cuando se avisó de la presencia de depredadores”.
Manifestó que las autoridades mantienen la alerta en puertos del Oriente del Estado y pidió a los pobladores a que no hagan uso de la ley en sus manos, que dejen que las autoridades tengan el control del problema, no hay que hacerse justicia por propia mano.