* Envió el alcalde al fraccionamiento a personal de Obras Públicas, Planeación y OROMAPAS. * Surgen conflictos en este fraccionamiento irregular con personas que no pagan el Servicio de Energía Eléctrica.
Por Paty Aguilar
Durante la tarde de este miércoles, se registraron connatos de riña entre las familias invasoras del fraccionamiento Villas Miramar debido a diferencias con una de las colonas con el dirigente de los colonos, Ramiro Gómez Lizárraga, incidente que fue aprovechado por otro grupos de colonos que discrepan con el también secretario de la Confederación Agrarista Mexicana Regional, organismo que ha logrado, a través de gestiones gubernamentales, dar el servicio de agua y energía eléctrica a sus representados.
De manera organizada, los colonos que representa Ramiro Gómez, se cooperaron para conectarse al servicio de la CFE, cuota de aproximadamente 1300 pesos por familia, dinero que ha sido pagado por casi todos los colonos, sin embargo, una de ellas, este miércoles, se quejó ante los medios de comunicación de que un día antes le había sido retirado el servicio porque no había podido pagar, y que sin avisarle, se le había desconectado por parte de Ramiro quién poco después informó que actuó, a petición de los demás colonos que si han pagado este único cobro.
Entre dimes y diretes de ambas partes, la situación se puso tensa luego de que la colona se mostró en total desacuerdo por la manera cómo se le había desconectado, de tal manera que momentos después, otro colono amenazó al dirigente al parecer con una pistola y más tarde, otra persona, ajena, por la vía de fuerza conectó a la energía eléctrica a la colona inconforme y la situación se tornó agresiva entre ellos, incluso al parecer hubo golpes, sin embargo, los colonos que si pagan el servicio finalmente volvieron a desconectar el servicio, la policía municipal atendió el asunto y la situación se por el momento se calmó.
El grupo opositor a los colonos que representa Ramiro Gómez, a través del licenciado, de Marco Antonio, vía telefónica nos informó que el alcalde, Héctor Paniagua Salazar estaría presente en el fraccionamiento a las cinco de la tarde, hecho que aprovecharía para denunciar al dirigente de la confederación, sin embargo, el presidente municipal no asistió, en su lugar envió al director de Obras Públicas, Hugo Ortega quien llegó acompañado por personal de Planeación y del OROMAPAS.
Según informó vía telefónica la señora, María Rangel, Secretaria de Acción Femenil de la Confederación Agrarista, los representantes del Ayuntamiento acudieron al lugar para ofrecerles los servicios básicos, lo cual consideraron como sorpresivos y fuera de lugar, ya que el Ayuntamiento tiene pleno conocimiento de las necesidades que tienen en este lugar las casi dos mil familias que ya están asentadas en este fraccionamiento que fue abandonado por la constructora INMOSER que se desapareció desde hace más de tres años.
Cabe mencionar, que un gran porcentaje de estos colonos se han organizado para dotarse ellos mismos de los servicios básicos ante la falta de atención de parte del Ayuntamiento, es por ello que ahora de manera rudimentaria tienen servicio de agua que se bombea a través de pozos y de energía eléctrica gracias a las gestiones que estos dirigentes han hecho ante la CFE, según informaron los dirigentes.
Finalmente, es menester resaltar, que estas familias mantienen el lugar limpio donde se repartieron los terrenos atrás de las casas que ya están construidas. Alquilaron máquinas y pagaron topógrafos para alinear las calles, de tal manera que hay una distribución de vialidades amplias, al parecer conforme al proyecto del fraccionamiento, esto con el fin de respetar el plano, en dado caso de que al final del día, luego de buscar una negociación con la constructora, puedan ellos pagar estos lotes, así como las casas que abandonadas, fueron habitadas por estas familias.
Sin embargo, entre ellos, hay colonos que pretenden desestabilizar este movimiento en pro del derecho a la vivienda que tienen, lo cual, ha sido rechazado de manera tajante por los colonos que están organizados y pagando lo necesario para que las gestiones de los dirigentes lleguen a un buen fin que los beneficie a todos.