Un escrito entregado al pleno de ayuntamiento para que sea leído en la próxima sesión, describe el malestar de un elemento de la policía cuya esposa murió como consecuencia de una negligencia en servicios médicos municipales
Por Mauricio Lira Camacho
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Como consecuencia de presunta negligencia en servicios médicos, murió la esposa de un policía, escrito que será leído en la próxima sesión de ayuntamiento.
Dicho documento en poder de este medio, describe el sentir de un elemento de la policía municipal de Puerto Vallarta, que vio morir a su pareja poco a poco, luego de una aparente negligencia médica.
Esta situación es derivada de la falta de atención con recursos económicos de la actual administración, cuya encargada de la hacienda municipal es Martha Alicia Peña.
Falta de medicamentos, asistencia y que representa una pésima atención, dicho por empleados municipales, quienes han hecho sus quejas a regidores como el priista Carlos Efrain Yerena y el panista Héctor Gallegos de Santiago.
Ediles que han llevado este asunto al pleno de ayuntamiento, en más de una ocasión.
En el escrito que se espera sea leído en la próxima sesión de ayuntamiento, se explica, “ciudadanos presidente y regidores, esperando que todas sus obras del malecón y su presidencia les brinden satisfacciones que las que tienen en sus antecedentes, quiero decirles que los fantasmas no se encuentran en las cárceles”.
Prosigue que, estos se encuentran en las celdas negras de nuestra propia conciencia, y que la justicia se hace por nuestro juez interno.
En el escrito se lee, es un juez interno del cual no podemos huir, espero tengan unos minutos para escuchar esta correspondencia, hace algunos meses, perdí a un integrante de mi familia, a mi esposa, por falta de atención médica y lo más triste es que de haberla atendido a tiempo, por falta de atención médica permitieron que la enfermedad siguiera, de haberla atendido a tiempo, mi esposa seguiría con nosotros.
“Cuando la enfermedad ya estaba muy avanzada, la mandaron al hospital regional al llegar nos dijeron que no tenían el equipo médico necesario para su atención, y que había que llevarla de inmediato a una institución médica privada, y al solicitar el respaldo del doctor Sánchez, me pidió que yo pagara el 100% del costo y después me reembolsarían el 50%, al no poder conseguir en unas horas el recurso llegó la lamentable, la muerte”.
“Hoy padezco mis desesperados esfuerzos que fueron inútiles, me es difícil reconstruir mi vida, siento un odio hacia todos porque no se pudo hacer nada, a ese imperio que hoy reclama mano dura contra la delincuencia y aplausos a gobiernos corruptos, señores asesinos, señores que torturan quisiera que hubieran estado esa noche del sepelio que vieran las caras de nuestros hijos, y que con esa frialdad que los caracteriza pudieran brindarles el consuelo o el pésame”.
“Acabamos de pasar una navidad, sin el calor de una madre y el amor de una esposa, en un hogar destruido por la negligencia de una autoridad insensible que prefiere gastar 14 millones de pesos en imagen”.
“Es un concepto de imagen que como cifra tomo en la referencia de un medio de comunicación, y que con tan solo 35 mil pesos, mi esposa seguiría con vida, quiero también hacer referencia de un regidor que trae emblema grabado como si fuera de su propio cuerpo, ese uniforme del cual no se desprende (CTM), y sí con esa investidura junto con el alcalde, se burlan de los derechos de los trabajadores”.
“Y que está haciendo Gil, (Gilberto Lorenzo Rodríguez, secretario general del sindicato de empleados municipales), y de los regidores que solamente me causan en este momento lástima y vergüenza”.
Finalmente este elemento de la policía que pide no se maneje su nombre, recalca, “quisiera preguntarles que hubieran hecho en una negligencia con algún miembro de su familia, y que por que son negligentes con los trabajadores, solo me resta decirles que cumplan con su trabajo y espero que esto no les llegue a pasar”, lamentó.