Madre perdona a homicidas; “frente a mí le quitaron la vida»

Pausada y tranquila, la señora Juanita Ocampo Domínguez otorgó el perdón a los asesinos de su hija Gisela Mota Ocampo, presidenta municipal de Temixco, al hacer un llamado a la sociedad para recuperar los valores de la vida y evitar —ante todo— la venganza, durante un homenaje realizado a la alcaldesa en el Congreso de Morelos.

Los ojos de la madre que relató cómo un grupo de personas con capuchas ingresó a su vivienda en la calle Lázaro Cárdenas de la comunidad de Pueblo Viejo, durante la mañana del sábado anterior, veían hacia el techo del lobby del Poder Legislativo.

“Los perdono, los perdono”, repitió ante un público mayoritariamente femenino, a los que recordó que las luchas de ella como las de su hija Gisela Mota Ocampo fueron sociales, hacia quienes atentan contra el medio ambiente en Huexca con una termoeléctrica, la mina de una empresa canadiense que pretende operar en la zona arqueológica de Xochicalco que traerá consecuencias de contaminación en perjuicio de más de cinco municipios del sur de Morelos.

“Sí me lastima mucho que enfrente de mí haya cortado la vida de mi hija en mi propia casa, un grupo de encapuchados sin rostro físico pero con el rostro de la maldad”, expresó.

Ocampo Domínguez afirmó que a pesar de eso aprendió que lo principal es aprender a perdonar, por ello lanzó su perdón a los que asesinaron a su hija la presidenta municipal de Temixco, Gisela Raquel Mota Ocampo.

“Como decía Gandhi: si seguimos la ley de ojo por ojo todos nos quedaríamos ciegos. Por eso hago un llamado a la sociedad, como humanidad hagamos conciencia en recuperar los valores de la vida, a los derechos universales, los derechos de la madre tierra. Pidamos justicia para que sirva de luz y motivo a la sociedad, a no atemorizarse y que en comunidad nos organicemos y movamos las fibras del ser humano a trabajar por la paz, por la paz interior y la paz colectiva”, manifestó.

A su vez, la presidenta de la Junta Política y de Gobierno, Hortencia Figueroa Peralta, lamentó que dentro del asesinato de Gisela Mota Ocampo haya la participación de jóvenes adolescentes, por los que solicitó repensar y apoyar, principalmente, aquellos que viven en la extrema pobreza y la pobreza.

Son jóvenes que calificó sin identidad filosófica y que han sido atrapados por el crimen organizado por su hambre, pero que requieren de ser vistos para poder salir adelante.