* La profesora, Zoelia Cervantes, supervisora de zona escolar 29 de Bucerías, se mostró incompetente para resolver inconformidad de madres de familia de la primaria Oliverio Vargas porque a partir de este miércoles 11 de noviembre 2015 se les prohibió llevar alimentos a sus hijos en hora del recreo.
Por Paty Aguilar
NoticiasPVNayarit
La presidenta de participación social, la presidenta de padres de familia y el director, tesorera y dos personas más, pasaron a cada uno de los salones de la primaria Oliverio Vargas de Bucerías, para hacerles saber que a partir del miércoles 11 de noviembre que totalmente prohibido la entrada de alimentos por orden de la SEP y el Reglamento que existe.
Sin embargo, en uno de los salones, la señora, Neydi Pérez Suárez, pidió que se le mostraran bases y fundamentos de dicha decisión, puesto que no se convocó a una reunión general para consensuar la idea, por lo que consideró que se trataba de una ilegalidad porque la SEP no contempla en su reglamento de tiendas escolares esta decisión tomada de manera unilateral por las personas mencionadas al principio.
Entrevistada al respecto, comentó Neydi Pérez, que hace no menos de tres meses, en Nayarit, se aprobó la ley que prohíbe la comida chatarra en las primarias, por lo que no estaba de acuerdo en aceptar dicha medida sin que antes no intervenga la Secretaría de Salud de Nayarit para que verifique la comida que se está vendiendo a los alumnos de esta primaria, comida, dijo que consiste en tortas, salchichas con chile y chamoy y tanto ella, como otras madres de familia, así como los propios niños no quieren comprar esa comida, motivo por el cual, a la hora del recreo varias madres de familia les llevan alimentos a sus hijos.
Explicó la madre de familia, que el interés de las dirigentes de los padres de familia, es que entren recursos a la tienda escolar, con lo cual está de acuerdo, sin embargo, les pidió a las autoridades escolares que entonces se licite el contrato para la venta de alimentos dentro de la escuela y se cumpla con ello los lineamientos que mandata en este rubro la SEP de Nayarit, esto con la finalidad de que efectivamente entren los recursos que están previstos en el reglamento de la Tienda Escolar, que establece un peso diario por cada alumno y en el caso de esta primaria son 400, por lo que dicha tienda debe estar aportando a la escuela 2 mil pesos semanales, es decir, al año debe de entregarse a la escuela 80 mil pesos, esto sin contar con las aportaciones “voluntarias” que cada año aportan los padres de familia.
En este sentido y dado que la escuela no está en buenas condiciones, Neydi Pérez y las madres de familia inconformes, solicitaron se haga una auditoría de los últimos cinco años, puesto que se está hablando de 400 mil pesos que tanto el director, como las y los presidentes de padres de familia debieron haber recibido de la tienda escolar y que deberán comprobar en qué se gastó este dinero, dado que los lineamientos de dicho reglamento, marcan que de este dinero, se debe comprar agua para tomar para todos los niños, material didáctico, un 45 por ciento de este dinero, debe asignarse para apoyo de niños de bajos recursos económicos, deben decir a qué niños se les apoyó, mejoras para la escuela, lo cual, dijo Neydi Pérez, no se cumple nada, pero será la auditoría, dijo, la que compruebe en qué se invirtió todo el dinero que se maneja dentro del plantel educativo.
Cabe mencionar que Neydi Pérez, se entrevistó con la supervisora de esta zona escolar 29 a la que pertenece esta primaria, profesora, Zoelia Cervantes, la que por cierto, ante la claridad de exposición que escuchó de parte de la madre de familia, su respuesta fue negativa, la trató de conflictiva y le hizo saber que todo lo que estaba diciendo no se podía hacer porque eso solo estaba en el papel y que la realidad era otra, que ese dinero se aplicaba para cuando había profesores incapacitados y que además, ella tenía debidamente sustentado todos los gastos de la primaria, entonces la madre de familia se los pidió, pero se negó a proporcionárselo, luego le pido le diera su nombre, pero también se lo negó y que si quería información fuera a la SEP.
Entonces, Neydi Pérez, le dijo a la profesora que ya había hecho una llamada a los SEPEN y se le pidió que la buscara a ella como responsable de la zona escolar y acudiera también a la URSE.
Ante esta negativa de la supervisora, las madres de familia inconformes, mediante escrito le harán la solicitud de lo antes mencionado así cómo pedir se licitara el contrato de ser necesario porque tiene conocimiento que la tienda escolar no está cumpliendo con el Reglamento, por lo que consideró que si su pretexto de no aportar la cuota que le ordena el Reglamento es porque los alumnos no le compran sus productos, entonces se deberá revisar e inspeccionar porque los alumnos no compran sus productos y la Secretaría de Salud también debe dar un dictamen al respecto porque algunos alimentos los consideran comida chatarra, pero es la Secretaría de Salud quien debe de definir si es no esta comida apta para ofrecerles en venta a los pequeños.
Tanto la supervisora como el director, le hicieron saber que no se puede hacer una convocatoria porque el contrato ya lo tiene la propietaria de la tienda escolar, sin embargo, Neydi Pérez, les informó que el contrato de la SEP para la tienda escolar, establece que deberán estar sujetos a la cuota y por ningún motivo podrá se modificada y de darse la inspección y resultara una sanción la tienda deberá seguir cumpliendo con esta cuota los días que la tienda quede inhabilitada y en base a esto, les dijo a los profesores, si se puede lanzar la convocatoria y finalmente, tajante la madre de familia les dijo:
“Los lineamientos no dicen que dos madres de familia (presidenta de sociedad de padres de familia y presidenta del comité social) tienen la capacidad de decir si está bien o no higiénicamente la comida que se vende, dice ahí que tendrá que ser el sector salud de Nayarit, dos madres no pueden decir si se cumple o no con los estándares de higiene y de salud para los alimentos procesados o elaborados dentro de la institución” Y es que el director, le explicó a las madres de familia que ya las dirigentes de los padres de familia habían revisado los productos y todo estaba bien.
Ante los argumentos legales de esta madre de familia y con la presencia de los medios de comunicación, la supervisora optó por dar a conocer que analizarían la situación, sin embargo, las madres de familia inconformes se presentaran este miércoles a llevar alimentos a sus hijos y de negarles este derecho, entonces procederán contra las autoridades escolares de esta primaria porque se estarían violentando los derechos de los niños a recibir sus alimentos procesados o comprados por sus padres según su gusto y respetando que no sea comida chatarra.
Cabe destacar que la reacción negativa de la supervisora contra esta madre de familia que con la ley en la mano le pidió su intervención para que explicara al director y dirigentes de los padres de familia que no podían hacer eso, es una muestra de su incompetencia para resolver el problema en los mejores términos, simplemente aplicando el reglamento de tiendas escolares para que los recursos entren a la primaria como se establece en el mismo; 400 pesos diarios, es decir, 2 mil pesos a la semana, lo que hace un total de 80 mil pesos al año.