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Sí, sí, sí, si… No, no, no, no

En la lucha contra el narco, hay que entender muchas cosas, sobre todo que se trata de un vaiven entre los países que elaboran las drogas, los países que las transportan y los países que la consumen.
Un ejemplo: ¿Colombia y los países del sur van a continuar en el negocio?… La respuesta es sí.
¿México y los países de Centroamérica van a continuar transportando los narcóticos al norte?… La respuesta es sí.
¿En los Estados Unidos del Norte van a continuar consumiendo todo tipo de drogas que llegan al mercado?… La respuesta es sí.

De regreso:

¿En los Estados Unidos van a dejar de vender armas a México y a todos los carteles de América?… La respuesta es no.
¿En México van a dejar de comprar armas de todo tipo para defenderse y para ofender a todo el país?… La respuesta es No.
¿Los carteles de México y de centro y Sudamérica van a dejar de recibir los millones de dólares que produce este lucrativo negocio?… La respuesta es no.
En este vaiven tan lucrativo… Los muertos los pone México, principalmente.
En los Estados Unidos no van a dejar de consumir nunca todo tipo de drogas y nunca van a dejar de vender armas a los carteles de México y de Colombia… Este también es un lucrativo negocio.
Aquí, los únicos que pierden son las familias, los jóvenes, el ejército, los policías, los civiles, los periodistas todos de México.
Este año van ya ocho periodistas que han caído asesinados, van más de cinco mil asesinatos de policías, soldados, miembros de la armada y pasan en total de 28 mil las víctimas de esta campaña de terror que se vive en México.
Todo esto sin resultados pues tal parece que fue ayer cuando empezaron a matarse todos los involucrados en esta guerra del presidente calderón contra el narcotráfico.
Todos los días que dios amanece, los noticieros nos llenan de noticias sobre enfrentamientos, sobre levantotes, sobre hombres que aparecen con la cabeza cortada o descuartizados.
Noticias de que a muchos los desaparecen en un caldero, como si fueran los hornos crematorios de los alemanes en la Segunda Guerra Mundial.

Nada va a cambiar

Nada ha cambiado desde el primer mes que Felipe Calderón decidió combatir al crimen organizado.
Nada va a cambiar pues los gringos no van a dejar de consumir drogas y tampoco van a dejar de vender armas a los carteles… Al que sea, pues no me digan que no hay control en este negocio.
En Colombia van a continuar su producción de cocina y otros enervantes.
En México tampoco van a dejar de producir mariguana, amapola y sus derivados y tampoco van a dejar de producir y vender las anfetaminas.
El producto de todo esto son muchos millones de dólares… Es un tremendo negocio incontrolable… Tan incontrolable, que no hay razón para tantas muertes de uno y del otro lado.
No es por ahí…

La familia

La lucha anti drogas, debe empezar en la familia. Los padres hablar con los hijos y tratar de evitar que caigan en la drogadicción. Ser claros.
Si alguno de estos no escucha, pues ese será ya su problema… Así es como debe mirarse esta cuestión.
Descaradamente, por parte de las autoridades mexicanas, dejar fluir los millones de dólares y que estos sean fuentes de empleo convirtiendo estos millones de dólares en dinero limpio. En circulante que beneficie a las familias que trabajan.
Si alguien tiene la precaución de investigar, esta clase de negocios, por años y años han sido vistos con ojos de la vista gorda… Es decir los han consecuentazo en los Estados Unidos.
La única condición es que paguen impuestos… Porque de los impuestos y de la muerte, nadie se salva en el vecino país del norte.
Entonces esta guerra de Felipe Calderón, es como hacerse el “Tío Lolo”… ¿No les parece?

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