* Bajo un fuerte dispositivo de seguridad en la capital nayarita, el Ejecutivo Federal en compañía del gobernador, Ney González Sánchez, procedió a poner en marcha la planta de tratamiento «Oriente» de la ciudad de Tepic.
Tepic, 26 de abril de 2011.- Felipe Calderón arribó esta mañana a la capital Nayarita, bajo un fuerte dispositivo de seguridad, junto con el titular de la Conagua, José Luis Luege Tamargo; el mandatario cumple con su agenda de actividades en diversos puntos en Tepic.
En compañía del Gobernador Ney González Sánchez, el Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa cumple con los compromisos previsto para el saneamiento de agua para los nayaritas.
Y es que, luego de ser recibido en el aeropuerto Amado Nervo, Calderón inauguró la primera etapa de la planta de tratamiento de aguas residuales «Oriente» de la Ciudad de la Salud, en la margen derecha del río Mololoa.
Al respecto, Ney González confirmó en su muro de Facebook, que la recién inaugurada planta de tratamiento de aguas residuales en Tepic, es la más económica en su operación $0.20 por m3, el cobro.
También está contemplada la puesta en marcha del Laboratorio Estatal de Salud en la Ciudad de la Salud, así como una reunión con empresarios.
Finalmente, el Presidente Calderón y el Gobernador Ney González inauguran el tramo carretero San Pedro Ixcatán -Jesús María de la carretera Ruiz-Zacatecas.
DISCURSO DE FELIPE CALDERÓN DURANTE LA INAUGURACIÓN DE LA PLANTA DE TRATAMIENTO EN TEPIC
Para mí es motivo de gusto, de satisfacción, de alegría el poder regresar a Nayarit, y entregar a esta gran ciudad de Tepic la Planta de Tratamiento, la primera etapa, hay que decirlo, de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Oriente y dar inicio, a la vez, a la construcción de la segunda etapa que, al igual que la primera, estará produciendo agua tratada a razón de 100 litros por segundo.
Con estas obras importantes de infraestructura hidráulica, estamos avanzando, como ya se ha dicho aquí por el ingeniero Luege y por el señor Gobernador, hacia una solución definitiva a un viejo, añejo problema que ponía en riesgo la salud de los nayaritas y dañaba severamente el medio ambiente.
Ahora sí que el amante de la princesa Sangangüey se volvió un río de tristeza por la muerte de su dama, creo que ahora la bella Sangangüey es la que llora nada más de ver la podredumbre en que estaba convertido el río de lágrimas.
Y hoy, lo que estamos haciendo, en un trabajo conjunto entre el gobierno del estado y el Gobierno Federal, precisamente, es rescatando nuestros ríos.
Una gran tragedia que ocurrió en México a lo largo de los años es que los ríos se fueron constituyendo en drenajes abiertos y los campos y las carreteras en basureros. Y ese es el daño, uno de los más, quizá no el más grave, pero sí uno de los más visibles daños que hemos hecho a la naturaleza y también a la salud de las personas.
Porque la contaminación del agua de los ríos está asociada directamente con muchas de las enfermedades más frecuentes, por ejemplo, de los niños que están viviendo en esas zonas, tanto enfermedades gastrointestinales, como enfermedades respiratorias.
Como ustedes saben, las aguas residuales que se generan en Tepic, tanto las que se usan en las casas, como las de uso comercial e industrial, se descargaban directamente al Río Mololoa, que atraviesa la ciudad, un río, por cierto, bello.
Me lo imagino cómo era en su origen, sin haberlo conocido, pero al ver las riberas, los propios puentes que hay edificados sobre el río. El privilegio del paisaje de esta capital nayarita, marcada, yo diría, como firmada, rubricada por el Río Mololoa, se da uno cuenta de lo mucho que se había perdido y también, por lo mismo, de lo mucho que se está rescatando con el esfuerzo de saneamiento.
Y decía que no sólo por los malos olores, que de por sí son muy molestos cuando no se trata el agua residual, sino, sobre todo, por las enfermedades que trae consigo el agua residual.
Claramente, es hora, amigas y amigos, de devolverle a Tepic y de devolverle a su gente su río. Y es hoy lo que estamos haciendo con esta planta de tratamiento que inauguramos.
Así, amigas y amigos, el Gobierno Federal reafirma su compromiso con el mejoramiento de la calidad de vida de las familias de Tepic y de todo el Estado de Nayarit.
Se trata de una obra en la que se han invertido 70 millones de pesos, más o menos 60 por ciento del Gobierno Federal, 40 del gobierno estatal, y también es necesario mencionarlo que, con su construcción, obviamente, se generaron empleos, hasta 145, 150 empleos directos, y probablemente el doble de empleos indirectos en beneficio de familias nayaritas.
Pero lo más importante es que con esta planta y con la ampliación que se inicia, se van a tratar más de 200 litros de agua residual por segundo, con una calidad que cumplirá las normas vigentes para aguas tratadas.
Así, vamos a lograr sanear el cauce del Río Mololoa, restablecer el equilibrio ecológico de la región, en beneficio de 100 mil tepicenses, que viven en esta importante parte Oriente de la ciudad.
Esta Planta permitirá, además, luego de ser tratada con esta tecnología, que se reutilice si es necesario. Que se reutilice para áreas de riego, que pueden ser parques públicos, por ejemplo, camellones en la ciudad; que sea descargada al río, sin las consecuencias nocivas que antes tenía, como de hecho está ocurriendo en este momento, que se está descargando ya, limpia, el drenaje que llega a la Planta de Tratamiento se limpia y se pasa ya tratado al río; o bien, incluso, en el futuro, no es de descartar que se utilice para algún uso industrial, que también tiene un enorme valor.
En lugar de que el agua potable se use para las fábricas, que el agua tratada sea para uso industrial, y el agua potable, como debe ser, que sea para las familias.
O que se use para riego, incluso, que pueda ser usada para canalizarse al riego, alguna plantación, algún cañaveral cercano, que pueda llevarse por algún tipo de conducción el agua que produzca esta Planta de Tratamiento.
Incluso, agua para uso industrial, como se usa en muchas partes, vendida o para uso agrícola. Se compra el agua, y con lo cual se pagan los costos de manteamiento de estas plantas.
Es una gran noticia que con esta obra, y con la ampliación de la Planta de El Punto, que ya mencionaban también, se logrará tratar el 95 por ciento de las aguas residuales generadas en Tepic, y posibilitar llegar al 100 por ciento, que todos anhelamos.
Por eso damos pasos firmes hoy, con esta sencilla obra, para recuperar este recurso de vital importancia para los nayaritas de hoy y de mañana.
Pero además, esta obra tiene importantes beneficios económicos. El agua limpia genera nuevas alternativas para la región. Se pueden desarrollar, desde luego, desarrollos de esparcimiento para la gente por la ribera del Río Mololoa.
Si antes, con el agua negra, el río alejaba a los paseantes, con agua limpia pueden convertirse las áreas verdes, que toda ciudad moderna necesita para sus jóvenes y para sus niños, para sus familias.
No vamos a quedarnos, desde luego, ahí. Vamos a seguir trabajando y vamos a seguir trabajando con todo por Nayarit. Este año estamos invirtiendo aquí más de 350 millones de pesos en infraestructura hidráulica, seguimos impulsando obras como el Proyecto Río Santiago, del cual es afluente el Río Mololoa, y que consiste en la construcción de canales que permitan abastecer de agua a seis mil hectáreas en Santiago Ixcuintla, con lo cual incrementáremos la capacidad de producción y la productividad agrícola en beneficio de los productores de aquella zona y, obviamente, en beneficio de Nayarit.
Y así como trabajamos por Nayarit, por mejorar la calidad de la vida de sus familias, también estamos haciendo en estos años, en este sexenio, como bien precisaba el Gobernador Ney González, la mayor obra de infraestructura que se haya hecho en México en mucho tiempo.
En estos cuatro años hemos invertido más de 145 mil millones de pesos en infraestructura hidráulica. Qué tanto es eso. Bueno, es más del doble de lo que se invirtió en cualquier, en cualesquiera primeros cuatro años de cualquier Administración.
Con esos recursos, hemos aumentando las plantas de tratamiento de agua residual en operación, que pasaron de mil 750, a finales de 2006; a más de dos mil en la actualidad; es decir, 300, más de 300 plantas nuevas y otras 70, 70 y tantas que se están construyendo.
Igualmente, estamos atendiendo necesidades de agua en distintas regiones del país. Por ejemplo, la construcción del Acueducto II, de Querétaro, estamos, el Acueducto I, además es el acueducto tradicional que todos conocemos, colonial, muy hermoso, éste es el dos, que le va a solucionar el problema de agua a todo el Estado de Querétaro, durante más de 30 años.
O las presas, El Realito, Zapotillo, que le van a llevar agua para resolver la problemática de ciudades tan grandes, como León o como Celaya o San Miguel de Allende o San Luis Potosí.
Cabe destacar, amigas y amigos, como lo muestra el Censo de Población y Vivienda 2010, que las inversiones que hemos realizado en infraestructura básica entre un Censo y el otro, en los últimos 10 años, han permitido que hoy el 92 por ciento de los mexicanos cuenten con agua potable.
A pesar de que la población creció en todos esos años de más o menos 80, noventa y tantos millones de habitantes a 112 millones de mexicanos. No obstante, ese crecimiento también aumentó la cobertura de agua potable. De manera tal que, hay 92 por ciento de familias mexicanas, una cifra sin precedente, que ahora tienen agua potable.
Y lo mismo podemos decir que el 90 por ciento, según el Censo, tiene obras de alcantarillado. El servicio de agua, por cierto, ha crecido, particularmente, en las comunidades más pobres, y específicamente, en comunidades indígenas.
Todo eso muestra que estamos trabajando para dotar de infraestructura y servicios básicos a todos los mexicanos. Y lo hacemos, porque construir infraestructura es combatir de fondo las causas del subdesarrollo, las causas de la pobreza.
Lo hacemos porque una de las expresiones más injustas de la pobreza es que una familia con hijos, no tenga agua potable para sus más elementales necesidades.
Lo seguiremos haciendo, porque cada peso que invirtamos en infraestructura que provee servicios básicos, como electricidad, o como agua, o como alcantarillado, o como tratamiento de aguas residuales, es un peso que se invierte en el progreso y es un peso que se invierte en la salud de nuestro querido México.
Amigas y amigos nayaritas:
Finalmente, quiero recordarles que el agua es un bien escaso. Cada vez tenemos menos agua disponible, hay que cuidarla. No podemos permitir, por lo mismo, ni que se desperdicie, ni que se inutilice. Y, por esa razón, el agua tratada es, debe ser un agua que pueda ser utilizada. Y la única manera de hacerlo es limpiándola, a través de plantas de tratamiento como ésta.
En particular, me llama la atención que ésta puede ser una de las plantas con unos costos de operación más baratos del país. Yo le voy a poner mucha atención al funcionamiento de esta planta de tratamiento, porque de funcionar como está previsto que funcione, de operar como está previsto que opere, puede dar un abatimiento importante de los costos de operación en todo el país.
Miren ustedes. En mi Gobierno empezamos un programa que ahorita, por ejemplo, si un ayuntamiento o un sistema de agua potable y alcantarillado, un organismo operador, aplica para el apoyo de CONAGUA, nosotros, CONAGUA le paga, digamos, a destajo; es decir, te voy a pagar X cantidad por cada metro cúbico que trates. Si tú me produces un metro cúbico de agua, por ejemplo, yo te pago 50 centavos.
Hay plantas de tratamiento que les cuesta, no sé, 1.50 cada metro cúbico, nosotros ya le estamos ayudando con la tercera parte. Pero si a esta planta de tratamiento le cuesta 20 centavos cada metro cúbico de agua, le va a hacer negocio, incluso, pagar el costo de operación de la planta con el apoyo de CONAGUA y, a la vez, quedarse con 30 centavos, que le pueden permitir invertir en otras plantas, en parques temáticos, etcétera.
Por qué. Porque queremos que todas las plantas de tratamiento se utilicen. Puede haber gobiernos muy entusiastas, como lo son el Gobierno de Ney González y el mío propio en materia de plantas de tratamiento, impulsamos las plantas de tratamiento, hacemos cientos de plantas de tratamiento, como hemos hecho.
Y luego puede haber otros gobiernos que no les interesa o ya no quieren pagar la luz de las plantas de tratamiento, o ya no quieren pagar los sueldos de los empleados y las tiran, las dejan caer, las dejan sin producir.
Por eso, a mí lo que me interesa es financiar el costo de operación. Y no en función de qué tan bonito me presentes un proyecto. Tú dime cuánta agua vas a producir limpia, y con la calidad que me sea aceptable, y a ese, a destajo, insisto, pagamos el subsidio.
Yo quisiera que, incluso, así sea el financiamiento de plantas de tratamiento en el futuro. Se paga a destajo. Es más, si me vas a construir una, yo te voy a dar apoyos, por ejemplo, financiero a través de BANOBRAS, que me garantizarás con el subsidio que yo te dé en el futuro, con la producción del agua.
Porque a veces destinamos dinero presupuestal para hacer más plantas que no se ocupan. Por esa razón, ahora estamos tratando de destinar presupuesto para mantener en operación esas plantas, pero sobre hechos concretos; es decir, sobre litros, sobre metros cúbicos de agua que sean limpiados en esas plantas de tratamiento.
Y así, los organismos operadores van a tener además el incentivo económico de buscar la tecnología que, además de ser eficiente, sea una tecnología más barata. En fin.
Amigas y amigos.
En materia de infraestructura ambiental, como en muchas áreas de la vida pública en el país tenemos un rumbo claro, y estamos avanzando en la dirección correcta.
Hoy, por ejemplo, echamos a andar esta planta de tratamiento que le va ayudar a los tepitenses. Pero también hemos construido grandes obras de infraestructura y, por cierto, aquí mismo, en Nayarit.
Como es la Presa El Cajón, para producir energía eléctrica, o la Presa de La Yesca, que está también en construcción y esperamos terminar muy pronto.
Estoy convencido, amigas y amigos, que todos debemos asumir la responsabilidad de cuidar el medio ambiente, y de cuidar la salud de la gente. Lo podemos hacer con obras como ésta. Y por eso, como lo demuestra esta planta, quiero felicitar nuevamente a los nayaritas por esta obra tan útil para la comunidad.
Y quiero invitarlos a que sigamos sumando voluntades, sumando esfuerzos, por encima de nuestras diferencias para construir un Nayarit y un México limpios. Un Nayarit y un México que nos duren para siempre.
Que cuando vengan las próximas generaciones de nayaritas, cuando vengan los hijos de nuestros hijos, o sus nietos, no se les tenga que explicar, en una fotografía: Aquí había un río, aquí había un valle, o aquí había un bosque, sino que lo puedan ver, lo puedan disfrutar y verdaderamente sepan que ese patrimonio que era de ellos, lo cuidamos para ellos y que ellos deben cuidarlo para las futuras generaciones.
Es la única manera de tener, como queremos, un Nayarit y un México que nos duren para siempre.
Muchísimas felicidades y muchísimas gracias.