Autoridades europeas asestan golpe a la mafia

La Guardia Civil española desmanteló la mayor organización de narcotráfico y lavado de dinero asentada en España y dio a conocer los detalles de la operación “Miniyó” en la que se confiscó la cantidad de cocaína más grande jamás incautada a una sola organización.

La operación continúa abierta y aunque no se ha develado la nacionalidad de los detenidos, la embajada de México en Venezuela aseguró a Excélsior que hasta ayer no había información de que alguno de ellos sea connacional.

En la operación fueron detenidas 12 personas en España y nueve en Venezuela, y se confiscaron cinco mil 644 kilos de cocaína, 550 vehículos, 28 caballos de raza pura, 700 mil euros, obras de arte de alto valor económico, computadoras, joyas y relojes valorados en un millón de euros.

Se bloquearon 57 propiedades inmobiliarias de las cuales dos fueron valuados en cuatro millones de euros
cada una.

La primera parte de la operación “Miniyó”, que aún continúa abierta, fue realizada por la Sección de Blanqueo de Capitales de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil española, en junio de 2011, donde fueron detenidas 13 personas (cinco en España y ocho en Venezuela) entre quienes figuraba el líder de la organización criminal cuyas siglas son L.M.J. y quien continuaba dirigiendo la red, dando instrucciones a los hombres que se encontraban en libertad.

En esa misma fase se incautó el cargamento de casi seis toneladas de cocaína que iban a ser trasladadas a España desde el puerto venezolano de Palúa de San Félix, oculta en maquinaria pesada de movimiento de tierras.

Después de esta fase, la Guardia Civil descubrió que la “aparente actividad empresarial” de traslado de maquinaria y droga también servía para llevar a cabo operaciones de lavado de dinero, producto del mismo tráfico.

Según el informe, los agentes pudieron determinar durante esta parte de la investigación que la red contaba con un entramado de socios de diversas empresas relacionadas con la construcción de viviendas, movimiento de tierras y la ejecución de infraestructuras, en algunas ocasiones, con contratos con administraciones autonómicas y nacionales.

Así mismo se confirmó que L.M.J, procesado en la prisión de Soto del Real, en Madrid, tras su detención en la primera fase de la operación, continuaba dirigiendo la red, dándole instrucciones sobre cómo manejar el partimonio no intervenido y cómo recuperar los bienes confiscados.

Entre las operaciones más rentables, señala el informe, en las que la organización invertió está la canalización de fondos mediante inversiones en minas de oro en el África subsahariana, además de que gran parte de los beneficios obtenidos en el tráfico de drogas eran destinados a la compra de empresas de construcción y transporte en situación económica precaria.

Según el diario español ABC, entre los detenidos está José Carlos Gómez, dueño de Cover Collado Inversiones, una empresa de construcción y maquinaria.