* Bahía de Banderas, mantiene los focos rojos, luego de que en el mes de abril, se registraron cuatro ejecuciones, al parecer el mes de mayo continúa con la misma tónica, ya que este pasado 1º de mayo, en persecución varios hombres armados mataron a otro. De los agresores, la autoridad judicial no tiene “ni la mínima idea”.
Por la Redacción
Se escucharon detonaciones de arma de fuego en San José del Valle a eso de las ocho y media de la noche de este sábado 1 de mayo 2010 a la altura de las calles Ignacio Altamirano y avenida José Ponce.
Luego de recibir el reporte, patrullas municipales llegaron al lugar donde encontraron sobre el pavimento de la avenida José Ponce, a un hombre tirado boca abajo y escasos tres metros un vehículo Nissan Tsuro blanco 2002 con placas de circulación REG-84-98 de Nayarit con la puerta delantera del piloto abierta, justo frente al bar El Rojo.
De inmediato, los policías municipales aseguraron el área, minutos después arribaron al lugar de los hechos, patrullas de la Policía Estatal Preventiva, soldados y la agente del Ministerio Público, Josefina Torres Gutiérrez, acompañada por médico perito, José de Jesús García Alba.
Luego de revisar la zona, el personal del Ministerio Público, así como los investigadores, localizaron 14 casquillos de bala del calibre 7.62 de las que utilizan las armas AK-47, mejor conocidas como cuernos de chivo. Dichos cascajos se localizaron entre la tierra de la calle Altamirano justo antes de entrar a la avenida José Ponce y sobre el pavimento de esta calle.
Tras ser revisado el cuerpo del hombre, se observó que este no traía identificación personal, por tal motivo se registró como persona desconocida. Asimismo, al inspeccionar el vehículo, entre otros enseres, se encontró una bolsita de polvo blanco, la cual fue analizada en el lugar por el personal militar para luego ser entregado a la agente del Ministerio Público.
Sobre cómo ocurrió el frío asesinato, se presume que al hoy occiso lo iban persiguiendo y fue en el cruce de esta calle donde le dieron alcance recibiendo impactos de bala el vehiculo en la parte lateral del lado del piloto. Herido de muerte el conductor solo avanzo unos 40 metros sobre la cinta asfáltica, detuvo su vehículo, abrió la portezuela, quizá con el intento de huir corriendo, pero solo logró caminar unos siete pasos para caer boca abajo y morir en el lugar.
Así lo encontraron los policías municipales y así permaneció durante casi dos horas en espera del criminólogo de la PGJ que nunca llego. Ante tanto tiempo de espera, la Ministerio Público, determinó que se levantara el cadáver mismo que fue trasladado a los descansos de la funeraria San José donde se le practicaría la autopsia de ley. La víctima aparentaba tener la edad aproximada de 27 años, vestía pantalón azul de mezclilla, camisa amarilla con finas rayas negras y botines vaqueros de color blanco. Tez morena y bigote ralo recortado.
Cabe mencionar, que la autoridad ministerial durante este tiempo no permitió la salida de los parroquianos que en ese momento se encontraban en la cantina El Rojo, los cuales fueron investigados sobre los hechos, ya que el cuerpo de la víctima y su vehículo quedaron justo frente a este antro. Los vecinos de la zona aseguraron no haber visto nada, solo escuchar las detonaciones. Sin embargo, trascendió entre los policías, que dicho carro acababa de ser vendido recientemente, datos que se le dieron a la autoridad ministerial como parte de los elementos de investigación del crimen cometido.