* De manera irrevocable, el ingeniero, Jorge Olvera Corona, presentó su renuncia de manera irrevocable ante el alcalde, Rafael Cervantes Padilla, luego de haber sido cuestionado su puesto por ser incompatible tras el escándalo desatado por haber firmado un convenio de pago con el Ayuntamiento por la cantidad de casi 37 millones de pesos por la obra del sistema de riego automatizado del camellón de la carretera 200. Pide se actué contra Héctor Paniagua Salazar, causante de su quiebra económica
Por Paty Aguilar
Con copia para los regidores que integran el VIII Ayuntamiento de Bahía de Banderas, el ingeniero, Jorge Olvera Corona, presentó su renuncia con carácter de irrevocable con fecha 10 de abril 2012 al puesto que desempeñaba como Subdirector de Obras y Servicios Públicos Municipales, ante el presidente municipal, Rafael Cervantes Padilla, nombramiento que recibió durante el mes de diciembre 2011, casi un mes después de haber firmado un convenio de pago con el VIII Ayuntamiento por un adeudo de poco más de 36 millones y medio de pesos (motivo de su renuncia) producto de un juicio que interpuesto contra el VII Ayuntamiento encabezado por Héctor Paniagua Salazar y que fue ganado por el ingeniero por la falta de pago de un remanente de poco más de 2 millones de pesos por la obra del sistema de riego automatizado que llevó a cabo sobre el camellón central de la carretera 200 durante la gestión municipal de Jaime Cuevas Tello, el VI Ayuntamiento. Dicha subdirección, ahora estará a cargo del ingeniero, Juan Luis Espinoza.
En su exposición de motivos, el ingeniero, Jaime Olvera, da cuenta de los detalles de dicho juicio que tuvo que interponer contra el VII Ayuntamiento porque el ex alcalde, Héctor Paniagua Salazar, se negó a pagar el finiquito de la obra en mención. Por tal motivo, pide al alcalde, Rafael Cervantes Padilla, que en lugar de proponer respuestas mesiánicas, se debe buscar la justicia: que pague el servidor público responsable del mal actuar y que con sus bienes reponga al erario público lo que se tuvo que pagar por consecuencias de sus actos en la administración pública pues eso lo establece la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del estado de Nayarit y la Ley de Responsabilidad Patrimonial, dado que es el camino de la justicia y el derecho el que debe de prevalecer.
En este tenor le dice al alcalde, “resulta irónico que yo como simple ciudadano lo hice valer, qué no puede hacerlo la institución del H Ayuntamiento de Bahía de Banderas, señalando como servidor público responsable al ex presidente municipal, Héctor Paniagua Salazar, mediante los procedimientos que la ley impone”.
Luego de agradecer el nombramiento que recibió por parte del alcalde, Rafael Cervantes, y para no exponer su amistad y confianza, es que decide solicitar su renuncia con carácter de irrevocable. Tras darle a conocer que seguirá defendiendo el derecho que le asiste y que le fue otrogado por los tribunales y convenido con el VIII Ayuntamiento, asimismo ofrece coadyuvar en los procedimientos que se realicen para buscar la justicia y se finque la responsabilidad contra quién la merezca, en este caso, el ex alcalde, Héctor Miguel Paniagua Salazar “porque eso es lo correcto y lo justo, y no buscar alternativas ilusas y arbitrarias que llevan como trasfondo el proteger a los verdaderos responsables, siendo estas las soluciones que en verdad debiera proponer un Licenciado en Derecho que se jacta de ser asesor” concluyó.