El ingreso de reos federales —la mayoría de alta peligrosidad— a cárceles estatales es responsabilidad de jueces y de autoridades locales, según Patricio Patiño Arias, subsecretario del Sistema Penitenciario Federal (SPF).
Reveló que desde principios del año pasado la Federación firmó un convenio con los gobiernos estatales en el cual éstos se comprometieron a rechazar a todos los presos del orden federal que les fueran enviados, “pero hay algunos que lo han incumplido, como el de Nuevo León”.
El funcionario no reparó en el déficit de más de 22 mil espacios carcelarios que tiene el gobierno federal…
En declaraciones vertidas en la página de la SSP-f, refirió que ningún detenido es puesto a disposición del SPF, pues el Ministerio Público Federal hace las consignaciones ante juzgados, “y son los jueces los que determinan hacia dónde van los internos”.
Afirmó que estas prácticas judiciales y estatales obstaculizan la política de traslado de reos federales a penales administrados por el SPF, “pues cuando nos piden cambiarlos ya hay procesos (legales o jurídicos) que prácticamente nos impiden hacerlo”.
En la actualidad, el gobierno federal paga a los estados por concepto de socorro de ley (dinero por cada uno de los internos federales) mil 250 millones de pesos anuales; son 50 pesos diarios por cada preso.
En torno a las pugnas de grupos criminales en el interior de las cárceles, describió que cuando los operadores delincuenciales o pandilleros son arrestados y encerrados, “dentro de los penales buscan reorganizarse, pero es responsabilidad del administrador penitenciario que esto no suceda… Lo más peligroso no es que haya miembros de diversos cárteles, sino la inobservancia de protocolos de seguridad, como cuando los custodios abren una puerta, contra esa traición no se puede hacer nada… En los penales federales, que ya están homologados y que tienen la misma norma de seguridad, no se ha presentado ni un solo incidente en los últimos cinco años”.
Arias describió que a principios del sexenio calderonista la Federación custodiaba sólo 3 mil 160 internos federales, pero hoy, después de ampliar y remodelar las seis instalaciones penitenciarias que ha administrado desde hace varios años y modernizar otras seis que eran subutilizadas por los estados, la cifra se ha incrementado a 19 mil, aunque los espacios disponibles ya son 23 mil.
No explicó por qué no se ha consumado el traspaso de los 4 mil faltantes.
La meta, con la construcción de ocho nuevos penales de alta seguridad, es absorber a los 45 mil presos federales registrados hasta ahora.
Aclaró que el objetivo de 45 mil espacios es acorde con la reforma en proceso al sistema de justicia penal, la cual contempla la aplicación de medidas alternativas de prisión.
El subsecretario solicitó al Congreso fortalecer el presupuesto para la estrategia penitenciaria y, en específico, para la contratación y capacitación de los técnicos y oficiales de seguridad que se requieren para operar las nuevas instalaciones. Y también aprobar la Ley del Sistema Penitenciario, que contempla la clasificación de reclusos por fueros, grado de riesgo y perfil criminógeno.
Infraestructura
Penales ampliados y remodelados: 6 (Almoloya de Juárez, Edomex; Occidente, Jalisco; Noreste, Tamaulipas; Noroeste, Nayarit; Islas Marías y Centro Federal de Readaptación Social en Morelos.
Espacios ganados: mil 200
Penales estatales subutilizados en proceso de rescate: 6 (Villa Aldama, Veracruz; Guasave, Sinaloa; Huimanguillo Tabasco; Guadalupe Victoria, Durango; Monclova, Coahuila y Papantla, Veracruz).
Penales en construcción con inversiones público-privadas: 8 (Hermosillo, Sonora; Gómez Palacio, Durango; Ocampo, Guanajuato; Buenavista, Michoacán; Coatlán, Morelos; Miahuatlán, Oaxaca; Comaltitlán, Chiapas y Saltillo, Coahuila.
Plazo para terminar obras: finales de 2012.
Espacios: 2 mil 500 cada uno, para un total de 20 mil.
Inversión: 32 mil millones de pesos.
Gastos de operación: entre 900 y mil 100 millones de pesos al año.
Internos custodiados por la Federación al inicio del calderonismo: 3 mil 160.
Hoy: 19 mil (16 mil 500 federales y 2 mil 500 del fuero común con alto grado de peligrosidad).
Espacios disponibles: 23 mil.
Traslados durante el sexenio: 13 mil 500.
Número actual de reos federales: 45 mil.
Reos federales en cárceles estatales: 28 mil 500.