Forjadores de Vallarta (i)

Teresa Barba Palomera.

La maestra Teresa Barba Palomera es figura señera en el ámbito educativo local y regional. Le distinguió siempre su compromiso con las causas de la niñez y juventud, y su sentido de responsabilidad. Fue baluarte de la educación primaria estatal, impulsora de la generación de escuelas y promotora en la formación de docentes. Llegó a Puerto Vallarta en 1943 y se convirtió en la primera directora del Centro Escolar 15 de Mayo, que abrió sus puertas el 1° de noviembre de ese año.

Nace en Mascota, Jalisco, el 15 de febrero de 1915. Hija de Isidro Barba y Ramona Palomera, Teresa a temprana edad queda huérfana de padre, […]”pero heredó de su madre, doña Ramona, su espíritu de lucha, rectitud, humanismo y responsabilidad, que le caracterizaron siempre” (CHÁVEZ SANJUÁN 1993).

En su tierra natal realiza estudios de educación primaria, luego de los cuales, su inteligencia y vocación le llevan a realizar la práctica docente en las dos escuelas primarias locales por tres años. Resuelta a abrazar por el resto de su vida la carrera de maestra, solicita al Director de Educación en el Estado, en estos términos: “Suplico a usted de la manera más atenta se digne extenderme nombramiento de maestra de grupo, comisión que procuraré desempeñar con entusiasmo, ya que mis grandes aspiraciones son cooperar a la buena educación de la niñez escolar jalisciense.” (CHÁVEZ SANJUÁN 1993).. Así, logra su nombramiento y se le comisiona a la Escuela Superior de Niños de Mascota, donde labora por siete años. Posteriormente, con la finalidad de cursar estudios en La Escuela Normal de Jalisco, se traslada a Guadalajara, donde estudia y al mismo tiempo presta sus servicios en diferentes escuelas de la capital jalisciense.

En 1942 recibe el reconocimiento de la Defensa Activa del Cuartel General de la XV Zona Militar por su patriótica actitud al formar parte como voluntaria en el grupo de mujeres adiestradas como Enfermeras de Urgencia y Primeros auxilios, ante el estado de guerra que vive México ( recordemos que el 22 de mayo de 1942, México declara la guerra a los países del Eje: Alemania, Italia y Japón).

En 1943 recibe su título de maestra normalista y llega a Vallarta para constituirse en la primera directora del Centro Escolar 15 de Mayo. “Llega trayendo en su bagaje el cúmulo de experiencias y enseñanzas dejadas en ella por ameritados maestros, como don Saúl Rodiles, Enrique García Ruiz, Francisco Rodríguez Gómez, Conchita Becerra y Carmen Aldrete, entre otros…” nos dice la maestra Josefina Chávez Sanjuán.  Y si “por sus frutos los conoceréis”, Teresa Barba trajo consigo la gran tradición de la escuela mexicana de La Revolución, la mística de la escuela rural mexicana de José Vasconcelos, Rafael Ramírez y otras tantas luminarias del magisterio nacional que se habían empeñado en redimir, por medio de la educación, a los desposeídos y a contribuir por el mismo medio a la unidad cultural nacional.

Como directora, la maestra Barba Palomera colocó a Vallarta en plano relevante en el ámbito estatal: “El nivel de conocimientos y rendimiento escolar se elevan sensiblemente llegando a ocupar, por este concepto, los primeros lugares entre las escuelas primarias del estado, dependientes del Departamento de Educación Pública…” (CHÁVEZ SANJUÁN, 1993).

Y su labor se extiende a la comunidad: “Incrementa las clases de cocina y bordados y crea el taller de corte y confección, no sólo para alumnas sino también para jóvenes egresadas y madres de familia que encuentran nuevas fuentes de trabajo” (CHÁVEZ SANJUÁN, 1993).

Dentro del marco de la gran cruzada nacional contra el analfabetismo, impulsada por el Presidente de la República Manuel Ávila Camacho, se instituye en Vallarta el Centro Nocturno de Alfabetización para Mujeres, cuya dirección se confiere a la maestra Teresa Barba. La maestra Josefina Chávez Sanjuán da testimonio del hecho: “Una vez más se pone de manifiesto su alto sentido de responsabilidad. No se da un solo momento de reposo: personalmente atiende un grupo de 40 alumnas, al mismo tiempo que vigila y asesora al cuerpo de maestras que la auxilian. Es un año de trabajo intenso. Los resultados no se hacen esperar, el éxito corona sus esfuerzos: Puerto Vallarta enarbola con orgullo bandera blanca y se coloca a la vanguardia de la campaña en el Estado de Jalisco. De ella diría en esa ocasión la profesora Hermelinda Pérez Curiel, inspectora de la zona, al rendir su informe ante las autoridades educativas: “Con amplio criterio en materia educativa mantiene su profesionalismo y se esfuerza por cimentar el de sus maestras logrando una gran proyección hacia la comunidad.”

Su compromiso social no tiene límites y convence a su aliado histórico en la cruzada regional por la educación, don Agustín Flores Contreras, para construir el edificio del primer Jardín de Niños en Vallarta (1952) y, posteriormente, el de la primera Escuela Secundaria Federal en la localidad (1962).

Con su nombramiento como Inspectora Técnica de la zona escolar XV,  los municipios costaneros de Jalisco: Purificación, Cihuatlán, La Huerta, Tomatlán, Cabo Corrientes y Puerto Vallarta, se vieron beneficiados con su labor de levantar escuelas en todos sus rincones con la colaboración de autoridades e iniciativa privada.

La maestra Teresa Barba Palomera también participó en los quehaceres políticos del Municipio de Puerto Vallarta y del Estado de Jalisco. Durante la administración municipal 1953-1955 se desempeña como Regidora de Educación. “En 1958 (afirma la profesora Josefina Chávez Sanjuán) resulta electa Diputado por el XII Distrito Electoral y para orgullo nuestro se convierte en la primera mujer jalisciense que llega al Poder Legislativo, donde tiene el alto honor, por el voto de sus compañeros, de ser Presidente del Congreso; y cuando el primero de febrero de 1959 el Lic. Agustín Yáñez, gobernador del Estado de Jalisco, rinde su sexto informe ante la XLII Legislatura, los vetustos muros del Palacio de Gobierno recogen su voz que se eleva clara y convincente para dar respuesta a ese informe y dejar grabado su nombre en los anales de la historia de Jalisco.”

Y del incremento a su preparación profesional, se dice:

“Becada por la UNESCO, realiza estudios de Desarrollo de la Comunidad en el Centro Regional de Educación Fundamental de América Latina (CREFAL), en Pátzcuaro, Michoacán. Título por la Escuela Normal Superior de Jalisco, en la especialidad de Pedagogía. Maestría por la Universidad de Oaxaca y Diplomado en Historia por el Colegio de Jalisco.”

Finalmente, ocupó el cargo de Supervisora Técnica de la Zona Escolar Núm. 03 de la ciudad de Guadalajara.

Falleció el 15 de enero de 1996.

Puerto Vallarta honra su memoria con el nombre de un histórico plantel educativo.