*Dos asuntos presentados en cabildo por parte del regidor, Omar Guerra, pusieron en evidencia al jefe de Fiscalización, por actuar con negligencia y omisión afectando con ello a particulares y pidió su remoción. José Gómez, le echó la culpa al SARE y del otro asunto pidió al afectado solicitar a transparencia documento de concesión de la CONAGUA por zona federal en disputa que aseguró el director jurídico tenerlo en su poder, pero no lo mostro…
Por Paty Aguilar
Luego de haber pasado mucho tiempo para resolver controversias entre particulares de dos casos que fueron expuestos en cabildo por parte del regidor, Omar Guerra, en contra del desempeño del Jefe de Fiscalización, Adán Alejandro Ortíz, se dio el uso de la voz a los particulares afectados que detallaron la falta de acción efectiva por parte de este funcionario municipal el cual, de manera férrea fue defendido por parte del alcalde, José Gómez Pérez, que por todos los medios buscó protegerlo, sin embargo, sus argumentos no fueron suficientes para que los presentes se convencieran de los mismos.
Uno de estos caso fue por parte de un particular que rentó su propiedad a un comerciante, pero que por diversos motivos salieron mal y ya no hubo contrato, esto desde poco más de un año, motivo por el cual se entabló un juicio civil por parte del propietario del inmueble, sin embargo, el jefe de Fiscalización, a pesar de los reclamos por parte de la persona afectada, permitió que el local se siguiera ocupando con el argumento de que la persona demandada había acudido al programa SARE que le permitía trabajar mientras se realizaban los trámites correspondientes, sin embargo, el propietario del inmueble, ahí le reprochó porque le permitía mantener abierto el local sin cumplir con los requisitos que se exigen como es el contrato, además de saber que existía un juicio contra esa persona para que le entregara el local.
Adán Ortíz, en su defensa argumentó que si se le había multado, pero que se había apegado al programa SARE y con ello él no podía hacer nada porque con dicho programa se dan facilidades para tramitar y cumplir con requisitos.
El alcalde, José Gómez, trató de culpar al propietario del inmueble por no haberle entregado al jefe de fiscalización, una copia del juicio civil, pero no respondió, ni él, ni el jefe de Fiscalización y tampoco el director del Jurídico, Fredy Bernal, porque se le estaba permitiendo abrir el local, ahora con otro nombre, si el denunciado no contaba con el contrato de renta del inmueble desde un año. La conclusión del alcalde fue que el particular debía entregar copia de juicio para con ello actuar en consecuencia.
El otro asunto fue por la ocupación de una zona federal aledaña a un canal de riego en San José del Valle, por parte de un taquero el cual no cuenta con concesión del lugar por parte de la CONAGUA. Se trata de un conflicto que ya lleva varios años que involucra también a otro particular que estuvo presente en la Sesión de Cabildo y que al darle uso de la palabra, explicó todo el trámite que de manera legal había llevado a cabo para que se desocupara ese lugar sin tener respuesta del Ayuntamiento por parte de Fiscalización porque ante este departamento el comerciante no cumplía con los requisitos al no contar con dicha concesión.
Tanto el fiscal como el director jurídico, Fredy Bernal, aseguraron que si tenían la concesión a nombre del taquero, motivo por el cual se le dio el permiso, sin embargo, el regidor, Omar Guerra, quien preside también la Asociación de Usuarios de Agua de Riego de Valle de Banderas, explicó que esa persona no podía obtener dicha concesión porque esta asociación ya la tenía y lo mismo argumentó la persona afectada, misma que ya había solicitado a la CONAGUA el oficio de concesión a su nombre, el cual no fue encontrado en los archivos de la delegación de la CONAGUA.
Asimismo, el regidor, Omar Guerra, mostró y fue leído por el Secretario de IX Ayuntamiento, un oficio por parte de la CONAGUA Nayarit, donde se le indica como presidente de dicha Asociación, liberar la zona federal aledaña a los canales y drenes del municipio de los cuales son concesionarios.
Aquí, el alcalde, José Gómez, con verborrea de por medio, sin investigar a fondo el asunto, le creyó a su director jurídico y al jefe de Fiscalización de que si contaban con el oficio de concesión a nombre del taquero, pero en ningún momento exigió que se le mostrara dicho documento, por el contrario, pidió al afectado que pidiera este documento por la vía de transparencia y hasta entonces se resolvería el problema, lo que dejó inconforme al regidor y a los particulares.