* Omar Camarena, Secretario de Turismo de Nayarit, intolerante, en vez de buscar soluciones, respondió de mal modo a empresario que exige, porque ya pidió desde hace muchos años, se atienda Nuevo Vallarta que está económicamente “muerto en vida”.
Por Paty Aguilar
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Un desagradable encuentro sufrió el empresario italocanadiense, Giovanni Zivoli, con el Secretario de Turismo de Nayarit, Omar Camarena, en el Club de Playa del FIBBA de Nuevo Vallarta, donde el funcionario estatal, llego con otras tres personas a revisar los señalamientos de la playa certificada debido a que se van a instalar otros, fue ahí donde el empresario, se acercó a él para invitarlo a que visitara las Villas de Nuevo Vallarta y también se cerciorará sobre el estado que guardan los canales del estero de Nuevo Vallarta que contienen aguas putrefactas debido a la contaminación incesante de aguas negras que llegan desde varios escurrimientos localizados en la zona, esto con la finalidad de que buscara soluciones.
Luego de escuchar al empresario, lo único que se le ocurrió al Secretario de Turismo, Omar Camarena, fue contestarle que si no le gustaba Nuevo Vallarta, que se fuera a Italia. Giovanni Zivoli, le refirió que esa no era una respuesta inteligente de un funcionario, que se diera cuenta que él estaba recibiendo un salario para que ayudara a resolver problemas y que él (Giovanni) tenía una inversión en Nuevo Vallarta que le estaba generando pérdidas debido al abandono en que se tenía a este centro turístico que desde hace 40 años en vez de avanzar, cada día se demerita más su plusvalía, cosa que el funcionario estatal, no entendió.
Zivoli comentó que este funcionario estatal no alcanza a ver la magnitud del problema de devaluación de Nuevo Vallarta, señaló que un departamento que hace 4 años tenía un costo de 400 mil dólares, ahora se ofrece en 150 mil dólares y ni así se vende, no hay compradores y todo por la falta de infraestructura turística en Nuevo Vallarta y el abandono en que se encuentra, por ello, dijo, es imperativo que se crezca con proyectos únicos que detonen, que relancen a Nuevo Vallarta, pero que con funcionarios improvisados como el Secretario de Turismo, poco o nada se puede hacer al respecto, precisó.